Las agujas de bola, comúnmente utilizadas en tamaños finos y medianos, se emplean para prevenir daños y deshilachado en tejidos ligeros y de peso medio, ya sean sintéticos o tejidos. La característica distintiva de estas agujas radica en la presencia de una bola en el extremo, la cual corta las fibras de la tela en lugar de dividirlas, a diferencia de las agujas afiladas convencionales. Este diseño ayuda a mantener la integridad de la tela y es especialmente útil en trabajos de costura que requieren un trato suave con materiales delicados.